Un sistema estelar recién descubierto a doce años luz incluye tres mundos en el rango de tamaño comprendido entre la Tierra y Neptuno, uno de ellos en la “zona habitable” de la estrella, donde el calor de su anfitriona permite que haya agua líquida.
GJ 1061d tiene aproximadamente 1,7 veces el “peso” o masa de la Tierra, y es probablemente un mundo rocoso. La energía que recibe de su estrella está entre lo que la Tierra y Marte reciben de nuestro Sol. En otras palabras, el planeta cae dentro de la “zona habitable” de su estrella. Si es rocoso y tiene una atmósfera adecuada, GJ 1061d podría tener agua en su superficie.
El planeta es el más externo de los tres descubiertos en este sistema y, aún así, orbita su estrella cada 12 o 13 días. Debido a que su estrella enana roja es tan pequeña y fría, la órbita cercana significa un planeta potencialmente templado. Además, la estrella parece ser más vieja y menos activa que las enanas rojas jóvenes, por lo que el planeta podría ser menos propenso a las nocivas erupciones estelares. Las observaciones no han permtido determinar la composición de GJ 1061d o si tiene atmósfera.
El descubrimiento de este nuevo sistema planetario, cuyos otros dos planetas también superan a la Tierra, es parte de una campaña científica inusual llamada la colaboración “Puntos rojos”. Carl Sagan llamó a nuestro planeta un “punto azul pálido”; Los puntos rojos son las estrellas enanas rojas dentro del radio de 16 años luz de la Tierra. El enfoque, que se centra en una estrella a la vez, ha producido otros descubrimientos emocionantes, incluido el de un planeta potencialmente rocoso que orbita a nuestro vecino estelar más cercano, Proxima Centauri, informa la web sobre exoplanetas de la NASA.
Se conocen unos 15 sistemas de exoplanetas en 16 años luz, la mayoría de ellos alrededor de enanas rojas, también llamadas estrellas de tipo M. Juntos, estos sistemas poseen 33 planetas; Más de la mitad incluye más de un planeta. Y el nuevo sistema se parece a otros sistemas más distantes, incluidos los siete planetas del tamaño de la Tierra que orbitan alrededor de una enana roja, TRAPPIST-1, a unos 40 años luz de distancia.
Un equipo internacional dirigido por Stefan Dreizler de la Universidad de Gottingen, en Alemania, descubrió el nuevo sistema utilizando el espectrógrafo HARPS en el telescopio del Observatorio Europeo Austral de 3,6 metros en La Silla, Chile. El instrumento mide las “oscilaciones” en el movimiento de una estrella, causadas por los tirones gravitacionales de los planetas en órbita, un método de detección de exoplanetas conocido como “velocidad radial”.
Fuente:Mundooculto.es